La Pontificia Academia de las Ciencias, en la Casina Pío IV del Vaticano, fue escenario anoche de la ceremonia de entrega de la VII edición de los Premios Razón Abierta, convocados por la Universidad Francisco de Vitoria (UFV) y la Fundación Vaticana Joseph Ratzinger/Benedicto XVI.

Autoridades y ganadores de la VII edición de los Premios Razón Abierta en la Pontificia Academia de las Ciencias en el Vaticano.
Los galardones, dotados con 100.000 euros, reconocen investigaciones y programas docentes que integran el saber científico con una reflexión filosófica, ética y teológica sobre el ser humano, en sintonía con la propuesta de Razón Abierta formulada por Benedicto XVI: una forma de conocimiento que no se limita a lo empíricamente verificable, sino que se abre a las grandes preguntas sobre la verdad, el bien y el sentido.
La ceremonia estuvo presidida por el Exmo. y Rmo. cardenal Kurt Koch, prefecto del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, quien subrayó que la razón abierta “no es un retroceso, sino un acto de valentía intelectual”, y añadió: “Solo una razón verdaderamente abierta es capaz de generar unidad en un mundo marcado por la polarización y el relativismo”.

Exmo. y Rmo. cardenal Kurt Koch entregando el premio a Ángela Franks
Koch remarcó que los Premios Razón Abierta contribuyen a la construcción de una cultura del encuentro al unir saber técnico con sabiduría humanista. En ese sentido, animó a los premiados y a sus universidades a seguir promoviendo un conocimiento que no renuncie a las grandes preguntas y que contribuya a la reconciliación entre fe y razón, entre ciencia y humanidad.
El acto fue moderado por María Lacalle, directora del Instituto Razón Abierta y vicerrectora de Profesorado y Modelo Formativo de la UFV.

María Lacalle durante su discurso en la entrega de los Premios Razón Abierta
El presidente de la Fundación Vaticana Joseph Ratzinger/Benedicto XVI, P. Federico Lombardi, S.L., destacó que estos premios “nos recuerdan que la universidad no puede reducirse a una escuela de especialidades. Su vocación es mucho más alta: debe enseñar a buscar el sentido, a hacer preguntas, a mirar también al cielo, no solo a la tierra”.
Lombardi remarcó que, más allá del ámbito académico, el diálogo entre razón y fe, entre ciencia y sabiduría, constituye un camino de reconciliación cultural profundamente necesario. “Los trabajos premiados muestran que esta síntesis no solo es posible, sino fecunda y transformadora”, concluyó.
Daniel Sada: “La universidad está llamada a no renunciar nunca a la búsqueda de la verdad”
Durante su intervención, el rector de la Universidad Francisco de Vitoria, Daniel Sada, defendió el papel de la universidad como lugar privilegiado para tender puentes entre disciplinas, tradiciones y culturas. Agradeció el compromiso de los premiados con una forma de pensar integradora, capaz de dialogar con la complejidad del mundo sin ceder al reduccionismo.
“La universidad está llamada a no renunciar nunca a la búsqueda de la verdad. La razón abierta no es solo una categoría académica, sino una actitud vital: la de quien se pregunta, escucha y se deja transformar por la realidad”, ha asegurado.
Sada recordó que la Universidad Francisco de Vitoria impulsa estos premios desde hace siete ediciones como parte de su misión institucional, en alianza con la Fundación Vaticana, y destacó la Mención de Honor concedida este año al profesor Pablo López Raso, director de los Grados en Bellas Artes y Diseño de la propia universidad, como signo del compromiso de la UFV con una formación profundamente humana y estética.

Pablo López Raso y Daniel Sada durante la entrega de los Premios Razón Abierta
Ganadores de la VII edición
- José María Torralba (Universidad de Navarra), en la categoría de Docencia, por El Programa de Grandes Libros de la Universidad de Navarra, un modelo de formación universitaria que integra la lectura de clásicos de la filosofía y la literatura con el estudio de disciplinas científicas. “Los grandes libros son una escuela de humanidad: ensanchan la mirada, afinan el juicio y ensanchan el corazón”, aseguró.
- Angela Franks (St. John’s Seminary, EE. UU.), por Body and identity: a history of the empty self, una historia intelectual sobre la crisis contemporánea de identidad desde una perspectiva teológica y filosófica. “El modelo de razón abierta permite a la teología y a las ciencias sociales y biológicas enriquecerse mutuamente, en lugar de contradecirse”, afirmó.
- David Thunder (Universidad de Navarra), por The Polycentric Republic: a theory of civil order for free and diverse societies, una propuesta de orden civil alternativo al Estado moderno, basada en asociaciones libres y diversas. “Razón Abierta representa una invitación a trascender los límites autoimpuestos por las ciencias modernas y por los sistemas burocráticos”, explicó.
- Juan Eduardo Carreño (Universidad de los Andes, Chile), por Thomistic philosophy in the face of evolutionary fact, una integración del pensamiento de Tomás de Aquino con los descubrimientos de la biología evolutiva. “La razón abierta no es una opción más: es la vía real del conocimiento”, defendió.
Menciones de honor:
- Pablo López Raso (Universidad Francisco de Vitoria), por Insolente belleza: una propuesta de apreciación del arte contemporáneo, una reflexión filosófica sobre el arte contemporáneo como vía de acceso a la verdad y al misterio. “La belleza es el lenguaje con el que la verdad nos seduce”, afirmó.
- Santiago Bellomo (Universidad Austral, Argentina), por Educación aumentada. Desafíos de la educación en la era de la inteligencia artificial, un análisis crítico del impacto de la inteligencia artificial en la educación y una propuesta pedagógica centrada en el humanismo clásico. “Debemos mirar al futuro con esperanza, sin renunciar a lo mejor del pasado”, señaló.

Pablo López Raso durante la entrega de Premios Razón Abierta
Un jurado internacional de prestigio
El jurado ha estado compuesto por destacadas figuras del ámbito académico internacional:
- P. Federico Lombardi, S.L., presidente de la Fundación Vaticana Joseph Ratzinger.
- Daniel Sada, rector de la Universidad Francisco de Vitoria.
- Marta Bertolaso, profesora de Filosofía de la Ciencia en la Universidad Campus Bio-Médico de Roma.
- Paolo Benanti, teólogo y miembro de la Pontificia Academia para la Vida.
- Rafael Vicuña, profesor de Bioquímica y Genética Molecular de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
- Javier Prades, rector de la Universidad Eclesiástica San Dámaso.
- Stefano Zamagni, presidente emérito de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales.
Razón Abierta como misión compartida
Desde su creación en 2017, los Premios Razón Abierta han reconocido más de 30 proyectos procedentes de 15 países, consolidándose como una referencia internacional en el impulso de una razón verdaderamente integradora.

La Pontificia Academia de las Ciencias, en la Casina Pío IV del Vaticano, escenario de los Premios Razón Abierta
La Universidad Francisco de Vitoria, a través del Instituto Razón Abierta, impulsa esta iniciativa como parte de su misión formativa y su modelo educativo, en el que la integración del saber técnico con la sabiduría humanista y trascendente constituye el eje central de la experiencia universitaria.