La base para la educación del carácter es el PROFESOR. Buscamos darle las bases necesarias para que pueda formar el carácter de sus alumnos. En el CEV buscamos ser también una comunidad de formación continua para los docentes y en donde ofrecemos un espacio donde poder compartir la mejores prácticas para lograr la excelencia en la educación. Formamos también a los directivos de modo que sepan y puedan implementar la educación del carácter en sus centros.

Las elecciones que toma un individuo determinan su futuro, y el propósito de desarrollar un buen carácter es la capacidad de tomar buenas decisiones. El carácter nos permite florecer como individuos y como una sociedad más amplia. Es por eso que el desarrollo del carácter, así como el logro del logro académico, debe ser el propósito de la educación.

No creemos que exista un modelo de cómo debe impartirse la educación del carácter. La educación del carácter debe ser moldeada por las necesidades de los niños y la comunidad a la que sirve. Pero sí creemos que, para que sea verdaderamente transformadora, debe ser planificada, intencionada y plenamente integrada en toda la escuela u organización. Sólo entonces se puede «enseñar», «captar» y «buscar» realmente el carácter.